La revuelta revolucionaria de 1849 en Dresde fue un completo fracaso. Richard Wagner, que participó activamente en ella, se vio obligado a abandonar la ciudad para evitar la detención. Su objetivo, París. Para ello, huyó en primer lugar a Chemnitz; después, volvió a Dresde para alcanzar Weimar, donde se alojó en la casa de Franz Liszt; finalmente, con pasaporte falso y atravesando Suiza, consiguió llegar a París. Allí, el enemigo fue otro. La llamada tercera pandemia de cólera había arrasado varios países de Europa, llegando ese mismo año a Paris, causando la muerte de miles de personas. Ello motivó que Wagner abandonara la capital francesa rápidamente, con el recuerdo presente de su padre Friedrich, muerto en 1813 tras otra epidemia, esta vez de tifus, en su Leipzig natal.
Este es el boletín número 165 de la Guía del Festival de Bayreuth enviado el 13 de marzo de 2020. Si no quieres perderte ninguno, no lo dudes y suscríbete ya.